lunes, 16 de julio de 2012

Se durmió mi patita.

Usaré la tipografía llamada Helvética, porque en diseño dicen que es perfecta. Ya, tengo muchas cosas que decir pero no sé por dónde partir. Seré directa y nada de metáforas que solo yo entiendo, porque después cuando vuelvo a leer todo lo que digo no recuerdo ni una mierda de lo que trataba de decir, y nada tiene mucho sentido. A ver... ¿Y si lo dejamos por capítulos a lo Tarantino? 


Capítulo 1: Case Closed. 

Hola Daniel, quería decirte unas cuantas cosas... Luego de leer infinitas veces mi fotolog y este blog, y esos mensajes que están en el celular, de los cuáles aún no me puedo (y no me  quiero) deshacer, llegué a ciertos pensamientos, no conclusiones, solo pensamientos que se me vienen a la cabeza... Estábamos enamorados, sí, como un par de idiotas embobados, eramos chicos y en algún momento comenzamos a tener diferencias, y esas diferencias no las supimos manejar, por la edad, por las circunstancias, por lo que sea. Te amé, te amé mucho y hubiera dado la vida por ti. Ahora podría decir que te amo, pero no sería verdad, y sería injusto. Te quiero, te quiero mucho, te tengo un cariño impresionantemente grande, pero es eso y nada más. Ya no te tengo rencor, ya no quiero recordar lo que pasó, todo lo bueno queda en mi mente y solo me gustaría decirte que no te alejaras, pero seguiría siendo la misma estúpida de siempre así que... sé feliz. Te llamé hace un rato y no me contestaste; supongo que es mejor así, debo dejar de depender de ti, siempre lo hice, siempre estuviste para que yo te contara mis cosas, todas mis cosas, cuando necesitaba que alguien me escuchara tú eras el único en que confiaba. Te quiero, espero que estés bien y que algún día podamos volver a hablar normalmente. Lo siento mucho, en serio. 

Hice algo malo la semana pasada. Creí que te ibas a ir, y pensando en algo como: "esta será nuestra última vez" lo hice, pero me sentí mal, me sentí culpable, lo explicaré después, pero en realidad no puedo hacer eso si no estoy enamorada, o por lo menos algún sentimiento parecido. Tuvimos meaningless sex. No más que eso. Quería sentir que te recordaba como aquel hombre que amé, pero no pasó, y te juro que lo intenté. Quería despedirte, pero volviste...

Capítulo 2: Lost Friend. 

Rodrigo por la chucha. Sé que no estuve ahí para ti cuando más lo necesitabas, y me siento como la callampa. Todos los días te veo ahí conectado. Cuando tengo plata en el celu siempre estoy a 2 segundos de mandarte un mensaje, con una disculpa, con un hola, con cualquier cosa pensando en que de nuevo vamos a hablar. Te extraño mucho. Me gustaba hablar contigo aunque fuera de puras weás, me encanta la manera en que te preocupas por mi e intentas ayudarme cuando tengo problemas y es por eso mismo que me siento tan mal. Me da hasta vergüenza hablarte, me da rabia no poder ayudarte, no poder decirte nada. Me das mucho miedo cuando pones esas caras, cuando me niegas todo, cuando intento que me cuentes algo y solo te cierras, no sé cómo hacer para que confíes en mi, no sé qué decir ni cómo actuar, y me siento mal por eso. Quizás nada de lo que digo sirve, eso es lo que siento, tratando de decir: mira, esta soy yo, siempre me mando este tipo de cagadas, siempre hago esto con toda la gente, no eres el único. No hay excusas. Me duele no hablarte, me duele el silencio. Te extraño. Cada vez que estoy en fantasilandia o cerca solo quiero hablarte, abrazarte y decirte cuánto significas para mi. Eres mi amigo todavía, eso quiero creer, quiero creer que no me olvidaste, que no piensas que soy solo una weona con la que compartes imágenes idiotas y con la que no hablas nada serio. Puedo ser mejor, puedo hacerlo. No quiero perderte, pero necesito que me ayudes. Sé que es tonto, es realmente patético. Pidiéndote ayuda para poder volver a hablarnos, soy una estúpida. Lo siento. Tal vez yo no servía para nada en tu vida y es por eso que no me hablas.... Tal vez no era ni un aporte. Estoy preocupada por ti, quiero saber cómo estás, en qué estás, todo! Vuelve. 




Capítulo 3: Don Oso.

Orlando es el tipo más bueno que en la puta vida he conocido. Su bondad es totalmente sincera y le sale del alma, es inocente, es bonita. Orlando es uno de mis amigos (recordemos que tengo una regla: no existen los mejores amigos, comparar es malo, poner a alguien por encima de otro es malo), Orlando es el niño/hombre al que rechacé porque me gustaba... bueno, ya llegaremos a eso. Orlando es mi compañero de preuniversitario, con el cuál no hablaba casi nada, solo me hacía reír y eso me hacía feliz. Porque ir a preu era un martirio, hasta que él y Xavier (puntaje nacional en historia que repitió). Siempre le decía al Daniel cuando lo llamaba durante recreos de las tallas de estos dos pelotudos. Pero un día sentí algo diferente por Orlando, por un simple y estúpido gesto: Ese día hacía un frío culiao, pero digo culiao porque era culiao; entonces como siempre pensando en que me veo pachoncita con mucha ropa fui muy desabrigada, salimos como a las 10 de la noche, y le dije a Don Oso que su polerón era muy lindo, y en un solo segundo se lo quitó y me dijo: te lo regalo. Fue tan... lindo. Y recién lo había comprado. Todavía tengo ese polerón. Estaba pololeando con el Daniel así que me dije: ¿Realmente estoy sintiendo algo por él?. La respuesta era no. Solo pasaba por un mal momento en mi relación, y cualquier gesto bonito me causaba felicidad. Pero cuando Daniel y yo terminamos, traté de verlo como algo más que un amigo. Pero justo una perra le había roto el corazón, entonces era un momento de debilidad, del cual me aproveché porque no fue tan diferente a lo que ella (Expensive) le hizo. Es que rayos, yo no sabía pero el Seba me gustaba desde hace muuuuuuucho tiempo. Pero eso no debería saberlo. Y de repente me dije, oh, podría ser... y ahí le rompí el corazón a mi amigo. Pero ahora es feliz y eso quería comentar, que a pesar de que me dan unos celos extraños porque él esté con esta niña, con la que comparte muchos intereses y otras cosas, me siento muy feliz por él. Me siento como si fuera una madre mirando a su hijo crecer. Antes de ayer tuvimos uno de los días más bacanes, compartimos mucho rato, hubo unos silencios y conversaciones incómodas y terminé regalándole condones. Inolvidable. Te quiero mucho Orlando.

Capítulo 4: Estúpidas y sensuales F's.

No he hecho ni una mierda de la FAU, he estado enferma y con eso me excuso, pero por la chucha que he procastinado. Nada, pero nada, evito hacer las cosas que incluso me gustan y sabes por qué? Porque estoy demasiado entusiasmada con la idea de quedar en la FEN y eso me está cegando un poco. Me gusta hacer ejercicios de mate y que me salgan y sentirme tan fuckyea y sentir que este año en realidad puedo patear traseros en la PSU a pesar de todas las mierdas que están tratando de imped ir que eso pase. Tengo 4 promedios 1's en la FAU y me avergüenzo, pero luego pienso: QUÉ LE PASA A LUPITA. Si yo no quiero estar aquí, ni siquiera sé porqué quiero estar al otro lado de la reja, solo lo deseo, es un ideal. Tengo ese miedo de mierda, qué pasa si no me gusta? qué pasa si todo cambia de aquí a algunos años?. Digamos que he estado hablando con Hernán, hola Hernán. Entré en confianza con el tipo de la nada, me cayó bien, se ve como una buena persona y además escribe bonito. Intentaré colarme con él a clases de cálculo/álgebra y otros para saber si realmente podré aguantar esto el próximo año, o buscarme otro proyecto de vida, otros objetivos, porque me está dando mucho miedo, demasiado miedo. Facultad de Arquitectura y Urbanismo... ¿Te cuento que pasó hace poco? Orlando me dijo que unos tipos que el conoce que van en el preuniversitario social de la FAU me encuentran rica. ME SUBIERON EL EGO CABROS, GRACIAS. Tengo un fan club y no lo sabía. Ojalá este segundo semestre me la pueda con la FAU, la FEN, y la PSU. Obstáculos culiaos.

Capítulo 5: Un pequeño viaje.

El jueves consumí droga. Droga de la cara, de la expensive. LSD. Con uno de mis otros amigos, Sebastián, pero este tiene un apellido raro. No había hablado tanto con alguien desde hace mucho tiempo, y la verdad es que lo necesitaba. El Seba fue mi apoyo durante estos últimos meses en muchas situaciones, más que nada son problemas con mi familia, problemas de decisiones, problemas de madurez. Él me ayuda, es como un maldito papá. Es muy tierno. La primera vez que trabajamos juntos dije: este weón me cae mal. Pero no era así, solo me extrañaba su manera de ser. Y ahora sé que lo admiro, como vives la vida, como piensas, eres inteligente, sabes qué hacer, sabes qué decir. Eres mi consejero, mi maestro y yo soy tu joven padawan. Bueno, siempre pensé que durante el viaje terminaríamos teniendo sexo por alguna extraña razón, y es que alguna vez sentí que me gustaste, o quizás no fue eso, quizás solo fue calentura, aún no lo tengo claro. La cosa es que algo había. Falló el plan de estar en esa casa, así que fuimos a la FAU, que lugar más seguro, buscamos una sala y paf, nació chocapic. Mentira, la droga no funcionaba, solo me hizo babear por tres horas. Al Seba no le hizo ni cosquillas, pero luego de tres horas y cuando a mi ya me había dado hambre fuimos al McDonalds de Santa Lucía, a comer unas hamburguesas y ahí ya estaba mal. A penas bajé del Titanic, del edificio ese de la FAU, empecé a ver la realidad en capas. Algo muy ñoño de mi parte, ver la realidad como en photoshop, como en ilustrator? Era una típica animación de las de disney antigua, y babeaba, y hablaba, y me expresaba y veía cosas. A decir verdad, fui muy feliz. Gracias. Pero para la próxima compremos más. No vi lo suficiente.

Capítulo 6: Please.


Hola. Esta es la parte que he estado evitando. Evito pensarla, evito decirla, evito escribirla. Pero al mismo tiempo no puedo dejar de pensar en esto. En ello. En él. En ti. Hola, Sebastián. 
Pero ahora es otro Sebastián, éste es el Free Rider, o por lo menos todos mis amigos te conocen así. A ver, Seba, tengo algunas cosas que decirte, pero ¿cómo?. La primera vez que nos hablamos, que nos abrazamos, que estuvimos juntos sentí cosas tan especiales, y tan lindas que hace mucho había dejado de sentir, y que pensaba habían desaparecido completamente. Sin mayor esfuerzo me hacías feliz, me hacías muy feliz. Pero no sé por qué, no sabría decirte porqué me gustas tanto. No sé. Así como tampoco sé por qué hice lo que hice, de repente, cambié de actitud. Y vi todo como distorsionado. No quería que la relación fuese una relación, solo quería un compañero, en realidad no, ¿qué estoy diciendo?. En un momento dado solo quería sexo. Soy una caliente de mierda, rayos. Pero el punto es que, algo en mi mente me hizo pensar que nunca jamás en la vida íbamos a poder estar juntos, como pareja, que nunca iba a funcionar, que eramos muy distintos, que estábamos en diferentes mundos. Pero cuando hice eso, eso del capítulo uno, cuando estaba ahí, "despidiéndome" me acordé de ti. No preguntes por qué, solo lo hice. Y recordé algunas cosas que había pensado. Así fue como me di cuenta lo tonta que fui... Y la verdad es, que me gustaría demasiado volverlo a intentar, pero ésta vez hacerlo bien. Por lo menos bien a mi manera. Ojalá pudiésemos conversar. Ojalá tuviese yo el valor para decirte lo que siento, lo que pienso. Me gustas. Te quiero. No quiero asustarte, no quiero alejarte. Quiero estar ahí para apoyarte, en todo momento. No sé por qué me nace. Quiero abrazarte ahora, quiero acariciarte y decirte que todo va a estar bien. Quizás nuestras diferencias no son tantas, y somos más parecidos de lo que creo. Pero cresta!, cómo hablar, cómo expresarme, debo madurar. Correr en círculos no es solución. Siempre le doy tanto color. Necesito ayuda. Bueno, adiós.


Que raro... este post es solo de hombres... otro día me dedicaré a las mujeres.... ese, ese es otro caso.Uf.




















No hay comentarios:

Publicar un comentario